Larga ha sido la espera, pero todo llega, porque todo está
escrito e impreso, en especial el calendario. Ha tardado una eternidad o, más
bien, una semana muy holgada y, según dicen, santa. Pero por fin recomienza
(todo inicio es un retorno y viceversa) el glorioso, prosaico regocijo de la
normalidad, pleno de ausente exaltación, desfile discretamente triunfal de tareas
sin estrépito, apoteosis de la calma y el estrés, arrobo de la cotidianidad,
penitencia nuestra de cada día, bendito sea quien lo quiera, no se discuta más
por ello. Seguir leyendo: https://www.lanuevacronica.com/pascua-de-lunes
(Publicado el 1/04/2018 en La Nueva Crónica de León, en una serie llamada "Las razones del polizón")
NOTA: La ilustración es de Pablo García (Pablo Je Je, pabloga.com), mes de Abril del calendario para 2018, gracias.
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