Votar resulta cómodo, molón y hasta democrático. Quizás por
ello, esta temporada se está poniendo de moda como solución para todo aquello
que no sabemos cómo solucionar. Votamos y ya está. Algo así como ir de rebajas
cuando se está de bajonazo: compramos una prenda bonita, agradable, llamativa y
ale hop, día perfecto. El problema viene después, cuando hay que ponérselo. Que
igual no nos sienta como nos vimos en el probador, con la emoción del momento,
o lo mismo no encontramos ocasión para llevarlo. O, simplemente, nos decepciona
pero ya le hemos quitado la etiqueta. Se ha puesto tan de moda votar que hasta
los sindicatos, antaño empeñados en la justicia social, ahora se enredan en la
justicia territorial, discriminando implícitamente trabajadores de aquí y de
allá (muy de aquí y muy poco de allá, además). El agravio comparativo une tanto
como separa.
Enseguida queremos irnos de los sitios que no nos gustan.
Cataluña es una nación, lo que no implica que abandonen el proyecto de país que
compartimos desde hace tanto, solo porque últimamente no les guste la deriva
que tiene. A mí tampoco, pero ya no puedo irme más. León no es Castilla, eso
también es evidente, pero ¿significa eso que apartados las cosas irían mejor?
Hay un efecto dominó que todos entendemos, y que llevaría a los zaheridos por
el “centralismo pucelano” a escapar de su mala sombra, empezando por los
pueblos de la propia provincia de Valladolid y concluyendo por Soria, que también
existe. Ahora bien, si vamos a comprar ese vestido, ¿cuándo y cómo lo
pondremos? O sea, si votamos irnos, ¿quién y cómo nos gobernará? Si van a ser los
mismos partidos que ganan elección tras elección y son responsables
precisamente de esta situación y de no haber decidido esto antes; si van a ser
los mismos tipos de aquí, con sus bisagras bien engrasadas ante el poder del
centro que sea, si va a ser un vestido como los que tenemos ya en el armario,
mejor paso de rebajas y doy un garbeo para espantar la pava.
(Publicado en La Nueva Crónica de Léon, el 13/5/2017:http://www.lanuevacronica.com/referendum-4 )
No hay comentarios:
Publicar un comentario